La contaminación en nuestras playas

Este verano ha sido noticia el cierre de diversas playas en las islas Baleares debido a la presencia de contaminación de aguas fecales en las mismas.

Según  las autoridades, los motivos de la contaminación de estas playas han sido diversos, tales como lluvias fuertes que han ocasionado la rotura de colectores, bombas de impulsión de aguas residuales que no funcionaron por falta del mantenimiento correcto, falta de mantenimiento de las plantas depuradoras, mal estado de los emisarios…

Estos días pasados han acontecido sucesos como el de Palma donde el Ayuntamiento ha tenido que cerrar las playas de Ciutat Jardí y Can Pere Antoni, debido a la presencia de aguas fecales, donde el citado Ayuntamiento alegó que fue debido a las intensas lluvias, cuando la realidad ha sido que las lluvias no fueron intensas ya que solo alcanzaron los 17 litros por metro cuadrado.

Cierre de playa en Palma por contaminación de aguas residuales
Cierre de playa en Palma por contaminación de aguas residuales

Pero estos problemas no solo acontecieron en Palma, ya que se han repetido a lo largo de toda la costa de la isla, alcanzando zonas como Andratx, Calviá, Can Picafort…

Efectivamente esto denota que algo está fallando, bien sea que las infraestructuras no se conservan adecuadamente, falta de los mantenimientos correctos, y en muchos casos infraestructuras que no son acordes con las necesidades reales pues se han quedado obsoletas, o ya se planificaron y proyectaron de forma no correcta.

Lo que llama poderosamente la atención es que estas infraestructuras deficientes en muchos casos y mal coservadas en otros muchos, solo salen a los medios de comunicación en los meses de verano, por el impacto que tiene cerrar las playas en plena temporada turística, y porque afecta a los intereses de la industria hotelera. Sin embargo es más que probable que en esos mismos lugares se hayan producido vertidos fuera de la temporada turística, pero en ese caso el interés en ello de la clase política y de los medios de comuniciación es nulo.

Desde Mar Sostenible pedimos a los responsables de las infraestructuras de tratamiento de agua residual, tanques de tormenta, sistemas de bombeo y colectores, que se preocupen por es estado de las mismas, que realicen  las acciones de mejora necesarias para acondicionarlas a las necesidades reales, que inviertan lo necesario para ello, que exijan responsabilidad a las empresas gestoras en caso de existir, y que no empleen transporte y tratamiento de las aguas residuales como arma política.

Seamos conscientes que nos va mucho en ello, no solo el enorme daño que se ocasiona a la industria turística, sino el daño a los ecosistemas naturales deteriorándose la fauna y flora, e introduciéndose contaminantes en la cadena trófica.

 

Las carencias en depuración de aguas residuales en España

La semana pasada ha sido noticia la multa impuesta por Bruselas a España por 12  millones de euros, y 11 millones cada seis meses, por deficiencias en los sistemas de depuración y conducciones de aguas residuales. Deficiencias encontradas concretamente en 17 núcleos de más de 15 000 habitantes.

Ríos contaminados
Ríos contaminados

La Directiva del Consejo de Europa de 21 de mayo de 1991, obliga en su artículo 3 y 4 a que los estados miembros, a más tardar antes del 31 de diciembre del año 2000, para las aglomeraciones de más de 15 000 habitantes equivalentes, a disponer de sistemas de colectores de aguas residuales urbanas, así como de un sistema de tratamiento secundario . Para las poblaciones de entre 2 000 y 15 000 habitantes equivalentes, los requisitos de colectores, el plazo que se disponía era para antes del 31 de diciembre del año 2005. En cuanto a los sistemas de tratamiento secundario, si la población está entre los 10 000 y 15 000 habitantes, debería estar operativo antes del 31 de diciembre de 2005. Si la población está entre 2 000 y  10 000 habitantes, deberia tener su tratamiento secundario operativo, si  vertiese en aguas dulces o estuarios.

España también tiene también cuatro expedientes abiertos por icumplimiento de la citada directiva, en lo referente a cuatro núcleos que vierten en zonas sensibles,  y tres que tienen que ver con los aproximadamente 1 000 núcleos de población que o bien carecen de colectores de aguas residuales, o bien sus  sistemas de depuración no son los adecuados.

Según el informe de la UE, de los estados miembros, solo cumplen la citada directiva Austria, Alemania y Países Bajos. España está por debajo de la media de países de la unión en cuanto a los porcentajes de cumplimiento, tanto en cuanto a la existencia de colectores, en cuanto a tratamiento biológico, también en cuanto a tratamiento secundario, y en cuanto a tratamiento más exigentes en aquellas instalaciones de tratamiento que vierten en zonas sensibles.

Estas aguas residuales no tratadas convenientemente, vierten tanto a nuestros ríos como a nuestras costas, y en todo caso estas aguas residuales insuficientemente tratadas acaban llegando al mar.

Además hay que tener en cuenta que la cantidad de contaminantes que llegan a nuestros mares es mucho mayor, ya que hoy por hoy hay muchos otros contaminantes que no se cotemplan en las normativas vigentes como lo son los denominados contaminantes emergentes. Un ejemplo de estos contaminantes emergentes son los procedentes de los medicamentos que consumimos.

Así pues es muy urgente que este país se tome mucho más en serio la contaminación de nuestros ríos y mares, y para ello es esencial que los vertidos procedentes de las instalaciones de depuración de aguas residuales lo hagan en las condiciones exigidas por la legislación, y además la legislación y las instalaciones se debe adaptar con prontitud a los nuevos contamiantes que vayan surgiendo con la actividad humana.